A lo largo del día,, se producen miles de incidentes entre conductores. Varios estudios en universidades, han podido demostrar que la violencia entre los conductores, cada vez, es más acentuada.
La violencia entre conductores.
Aunque siempre suele terminar, estas disputas con un par de gritos e insultos, cada uno de aleja del otro, al tomar direcciones diferentes. La semana pasada en las Vegas, esto no sucedió así.
Tammy Meyers, madre de cuatro niños, fue asesinada con un tiro en la cabeza, después de haber tenido un inocente con otro conductor. Según los investigadores, fue perseguida hasta su casa y una vez allí, le dispararon.
En el estudio, se habla que muchos conductores, no soportan a los otros y cuando sucede algo imprevisto, los papeles se pierden. Las situaciones más peligrosas, son las que uno de los dos, saca el teléfono y empieza a grabar.
Ante esto, la otra parte, se enfurece más y la situación empeora, hasta puntos insospechables. En Estados Unidos, a esto hay que sumarle, que muchos ciudadanos llevan armas encima.
Lo que les convierte, en pistoleros con el gatillo fácil. No solo ha sucedido lo de Las Vegas, sino que existen muchos casos, en los que un conductor dispara a otro. Un caso parecido, ocurrió cuando David Kollar iba por la interestatal 75.
Observaba como un vehículo, avanzaba de una forma peligrosa, entraba y salía del carril de emergencia. David Kollar, saco su teléfono y empezó a grabar; quería ante todo, conseguir la matricula para luego, interponer una denuncia.
El otro conductor, vio como estaba siendo grabado y se pudo en paralelo a David, bajo la ventanilla del copiloto y saco su arma. Le disparo, varias veces. David, salió ileso. Par otra familia, en cambio, no sufrió esa suerte.
Fue perseguida por un conductor, hasta que llegaron a un centro comercial, al bajar del automóvil, les dispararon, solo falleció el perro de la familia, que se abalanzo al pistolero para defenderlos.
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